Durante la jornada de ayer, como vimos en su momento, han tenido lugar dos acontecimientos fundamentales: Rusia se ha comprometido con Serbia hasta el punto de iniciar los preparativos para movilizar; y Serbia ha movilizado, antes de entregar su respuesta al ultimátum; respuesta que –era de esperar- ha sido considerada insatisfactoria por Austria-Hungría.
Veamos ahora cómo ha reaccionado hoy Europa ante estos acontecimientos.
En SAN PETERSBURGO el embajador Spalajkovic está exultante, 1.700.000 efectivos –comunica a su gobierno- están movilizando los rusos, con la intención de iniciar una enérgica ofensiva contra Austria-Hungría en cuanto esta ataque a Serbia. Como bien sabemos esto no es cierto aún, pero él no se desanima por tan poca cosa, es más, casi parece echar piedras contra su propio tejado cuando informa a los Rusos de que los serbios lucharán como leones, y que tal vez podrían ser capaces incluso, ellos solos, de derrotar a los austro-húngaros. Su postura queda aún mejor definida con un cable que envía durante el día de hoy a su gobierno: desde su punto de vista tienen una magnífica oportunidad de conseguir por fin la total unificación de los pueblos eslavos del sur; parece evidente que cualquier concesión austríaca de última hora va a estar fuera de lugar.
Spalajkovic no es el único en emitir noticias inexactas desde SAN PETERSBURGO. El Agregado Militar francés, General Laguiche, informa de que se están iniciando preparativos secretos en todos los distritos militares que lindan con Alemania, en especial en Varsovia, Vilna y San Petersburgo (frente a la frontera alemana); y el agregado militar belga de que el Zar ha ordenado la movilización de diez cuerpos de ejército en los distritos de Kiev y de Odessa.
Las noticias se difunden y pronto llegan incluso a los países neutrales, como Dinamarca. En COPENHAGUE, el Conde Széchényi, embajador austríaco, informa a su gobierno de que Eric Scavenius, Ministro de Asuntos Exteriores del país nórdico, ha recibido noticias que sugieren que Rusia ha empezado a movilizar.
De vuelta en SAN PETERSBURGO, el único que parece tener una idea cabal de lo que sucede es el Teniente General Oskar von Chelius, plenipotenciario militar alemán en la corte de Nicolás II, quien informa a su gobierno de que las autoridades rusas parecen haber inaugurado “la fase de preparación para una movilización contra Austria”.
¿Y los ingleses? Lord Grey no sabe mucho de lo que está sucediendo en Rusia, y al embajador Buchanan los rusos intentan echarle arena en los ojos explicándole que los preparativos militares que ve a su alrededor son para enfrentarse a una oleada de huelgas. Sin embargo el británico sabe que las huelgas han terminado ya, y que los movimientos militares se parecen más bien a preparativos de guerra.
¿Quieres opinar sobre esta noticia? Debate: El Desencadenamiento de la Primera Guerra Mundial
Viene de: El Día de la Respuesta. Durante la Jornada. Reacciones Varias.
Sigue en: 26 de julio, durante la jornada. El Punto de Vista de Londres.