Los fusiles ametralladores tuvieron también una gran presencia en España, antes, durante y después de la guerra. España dispuso de algunos modelos de fabricación nacional mezclados con importaciones extranjeras. Se repite el patrón con otras armas que ya hemos estudiado anteriormente.
Entre esos fusiles ametralladores se encontró el BAR (Browning Automatic Rifle) estadounidense y su variante polaca, el Wz. 28. La II República, siempre necesitada de armas, importó aproximadamente 600 unidades de ambas versiones. De esta cantidad, 100 cayeron en manos rebeldes tras ser capturado el carguero Silvia donde se transportaban junto a otras armas. Aunque su número no se puede comparar a otras armas como la Maxim o la DP-28 soviéticas, es interesante la aparición de este material en la guerra de España.
El BAR estadounidense diseñó en tiempos de la Gran Guerra y había tenido su bautismo de fuego en las últimas etapas de esta. La idea del fusil ametrallador era el de que el infante tuviera un arma automática para ser disparada desde la cadera mientras avanzaba. El BAR se convirtió así en el arma básica de apoyo a los pelotones del U.S. Army hasta mediados de 1950. Sus diferentes versiones fueron mejorando aspectos de diseño y fabricación. La variante polaca se empezó a fabricar en 1928, la diferencia frente al modelo original era el guardamano y el pistolete. Por lo demás era un arma idéntica.
Aunque no se tienen testimonios, o al menos no se han encontrado aún, de su experiencia en España es de suponer que prestaron buenos servicios si eran armas no desgastadas. El BAR era un arma robusta que prestó servicio en numerosos conflictos a lo largo del siglo XX, de estos solo recibió elogios por su enorme fiabilidad y potencia de fuego.
No obstante, el fusil era pesado y en versiones aparecidas en la década de 1930 y 40 se añadieron bípodes para que el tirador pudiera utilizarlo tumbado sin cargar con todo el peso. En el caso español no hay datos posteriores a la finalización del conflicto, aunque los informes del Servicio de Recuperación podrían aportar alguna cuestión. Actualmente en algunos museos de España se pueden ver ejemplares del fusil ametrallador Browning Wz. 28.
Características;
Longitud: 1.150 mm.
Peso: aproximadamente 9 – 9,5 kilogramos
Calibre: 30-06 (USA) 7,92 mm (Polonia)
Cargador: recto de 20 cartuchos
Cadencia de disparo: 500-600 disparos por minuto
Viene de Ametralladoras de la Guerra Civil (XIV): MG-13
Sigue en Fusiles ametralladores de la Guerra Civil (II): Chauchat M15
Para una guerra con contingentes tan grandes tampoco es un número significativo.
Desde luego los polacos hicieron un buen negocio con la II república, les vendieron de todo. Porque a veces se olvida pero la república no sol recibió armas de la URSS.
Al borde del riesgo
Paweł Deszczyński
Wojciech Mazur
Editorial: Editorial Neriton
Año de publicación: 2004
Edición: 1
Lugar de publicación: Varsovia
Páginas: 455
Formato: 26x36cm
ISBN: 83-88973-98-3
Descripción:
Una publicación sumamente valiosa de dos jóvenes historiadores aborda objetivamente este difícil tema. Los autores presentaron las condiciones de la acción de exportación y las actividades de la empresa SEPEWE que se ocupa de ella, la oferta de la industria de defensa polaca y el balance financiero de las acciones. Se describió el destino de las armas polacas en España, Rumania y las incautadas por los alemanes después del estallido de la Segunda Guerra Mundial.