Tras el primer informe emitido tras el desembarco (que puede leerse en su primera, segunda y tercera parte), Rommel pasó a ser un tanto más sucinto, tal vez abrumado por el tráfago diario de su cuartel general y por el aumento de las dificultades planteadas por las acciones de los aliados occidentales, especialmente su fuerza aérea.
Así, el 19 de junio, escribía:
Mi estimación general de la situación es la siguiente:
El enemigo ha traído a Normandía unas 25 divisiones [se equivocaba por dos] así como gran cantidad de tropas de Cuartel General y las ha desplegado en una cabeza de puente que va del [río] Orne a Montebourg. Ha llevado a cabo su plan de aislar la parte norte de la península de Cotentin, a fin de hacerse con la posesión de Cherburgo. Entre el [río] Orne y el [río] Vire, el enemigo, con dos importantes concentraciones, sigue con sus intentos de crear una base de partida para atacar hacia el interior de Francia, especialmente en dirección a París [en realidad, la capital francesa nunca llegó a ser un objetivo militar hasta que las circunstancias políticas iniciaron el movimiento hacia la misma, las tropas aliadas tenían previsto girar hacia el este por el norte de dicha ciudad].
A continuación, Rommel indica cuáles son esas dos concentraciones:
- Entre Tilly sur Seules y Caumont
- A ambos lados de la carretera nacional 172, para tomar St. Lo
A pesar de su superioridad –continúa el informe–, especialmente en fuerza aérea y artillería naval, el enemigo no ha conseguido ningún éxito en sus repetidos ataques a gran escala, en los que ha empleado hombres y material de un modo brutal, e incluso ha perdido terreno en la zona de Caumont [teniendo en cuanta que dos semanas antes no tenía un pie en Francia, la afirmación es aventurada…].
Hemos sufrido bajas, en la lenta progresión y limpieza de enemigos entre el [río] Dives y el [río] Orne, a causa de la artillería naval y la fuerza aérea enemiga. Según inteligencia, y según documentos fiables capturados al enemigo, este no ha alcanzado ninguno de sus objetivos lejanos, y se ha visto obligado a emplear fuerzas muy superiores a las previstas inicialmente. [Aquí Rommel vuelve a maquillar la realidad ¿qué pensaba que pretendían hacer los aliados con las fuerzas no previstas? O tal vez quiere dar a entender a Hitler que están empleándose en Normandía fuerzas previstas para el “verdadero” desembarco en Calais]
Debemos esperarnos a que el enemigo traiga más fuerzas –ya han sido identificados dos cuerpos de ejército británicos– y prepare una ofensiva general entre Tilly-sur-Seules y St. Lo, en dirección sur o sudeste, concentrando sus fuerzas y tras una intensa preparación a cargo de la fuerza aérea y todo tipo de artillería. Entretanto, el Primer Ejército Estadounidense, protegido por el sur, se preparará para atacar Cherburgo con el fin de hacerse con el puerto, que tiene una importancia decisiva para el enemigo [en contraposición con la posibilidad de que los aliados declinaran tomar dicho objetivo, afirmada en el informe anterior].
Frente al sector del Decimoquinto Ejército [alemán] los puntos en que se focaliza el ataque aéreo son en el frente del Canal, a ambos lados del cabo Gris-Nez, y a ambos lados del Somme. Según la disposición del reagrupamiento enemigo y las oportunidades estratégicas y técnicas, es de esperar un gran desembarco a ambos lados del cabo Gris-Nez o entre el Somme y Le Havre [La teoría del segundo desembarco vuelve a asomar aquí en todo su esplendor, y nada menos que en boca de Rommel]. La ofensiva general desde Normandía y un nuevo desembarco a gran escala podrían ser llevados a cabo a la vez, ambos con París como objetivo.
El enemigo ha sufrido bajas importantes en las batallas por la cabeza de puente, y hasta la fecha ha perdido más de 500 vehículos acorazados y 1000 aviones.
Una estimación de los efectos del arma a larga distancia [probablemente se refiere a las V1] no es posible actualmente, debido al poco tiempo que lleva en uso y a la falta de datos fiables.
Situación interna
En el teatro de operaciones, la población se muestra amistosa y los sabotajes y otras actividades de resistencia de los primeros días de la invasión han decrecido notablemente. Se enviarán más detalles tras la recepción de los informes de los ejércitos.