Veremos hoy las innovaciones que introdujo el rey Gustavo Adolfo de Suecia en sus ejércitos en todo lo relativo a la caballería y a la artillería durante la Guerra de los Treinta Años.
En lo que concierne a la caballería, Gustavo Adolfo descartó el uso del sistema de la caracola o «guerra barroca», y reintrodujo en Europa Occidental las antiguas tácticas de caballería de choque. Las reformas llevadas a cabo en la caballería de Gustavo Adolfo se basaban en la necesidad:
Durante la guerra con los polacos (1621-29), cuando la caballería sueca se enfrentaba a sus adversarios estaba en una gran desventaja. Generalmnte montados en caballos más pequeños, los suecos no podían luchar contra la caballería polaca en igualdad de conidiciones. Los polacos estaban todavía armados con las lanzas de estilo medieval, montaban en grandes caballos de batalla, y solo utilizaban sus pistolas antes de atacar al galope, con largas espadas o lanzas. Igualmente, debido a que muchos jinetes suecos solo llevaban una pistola, (los reitres alemanes por ejemplo portaban invariablemente dos), la caballería sueca era incapaz de ejecutar la táctica de la caracola con la efectividad de sus oponentes.
Después de varios años evitando enfrentamientos de caballería a gran escala, Gustavo Adolfo diseñó un método para mejorar la efectividad de su caballería. El tamaño medio de los caballos hacía imposible para el jinete ir más pesadamente acorazado, así que Gustavo Adolfo redujo la cantidad de blindaje con el objetivo de ganar más libertad de movimientos para sus jinetes. Al mismo tiempo, cambió las tácticas que debían utilizarse. La caracolas habituales de la guerra barroca destinadas a realizar las primeras descargas de fuego contra el enemigo fueron estrictamente prohibidas.
Gustavo Adolfo sostenía que mientras más rápido cargara una línea de caballería contra un enemigo, menos sufriría su fuego. Su caballería tenía que atacar al galope. Solo a la primera fila se le permitía disparar sus pistolas, pero debían reservarse hasta que vieran el blanco de los ojos de sus enemigos. Incluso en la batalla de Lutzen (6 de noviembre de 1632), Gustavo Adolfo prohibió disparar a su primera fila hasta que el enemigo hubiera disparado primero. Tan pronto como la primera fila disparara, todo el escuadrón debía cargar al galope.
Batalla de Lutzen
El uso de la caracola implicaba que la caballería debía ser desplegada en un número de filas relativamente grande, para garantizar que hubiera un fuego continuo mientras las filas de retaguardia cargaban sus pistolas. Cuando Gustavo Adolfo abandonó este sistema, y dispuso que su caballería solo disparara una vez antes de cargar contra el enemigo, pudo deplegar a su caballería en menos filas, debido a que un fuego continuo no era ya necesario. Al principio, redujo el número de filas a cuatro: las primeras tres debían cargar contra el enemigo, la cuarta debía permanecer en reserva.
Al tiempo de su muerte en 1632, la caballería sueca se desplegaba en solo tres filas. Poniendo en práctica estas maniobras en 1627, la caballería sueca comenzó a ser cada vez más efectiva contra la caballería polaca. El menor peso de las protecciones acorazadas significaba que las monturas suecas podían galopar mucho más rápido que sus contrapartes polacas, que con blindaje más pesado debieron de luchar más bien a medio trote. Al entrar en la Guerra de los Treinta Años en 1630, la caballería sueca obtuvo pronto algunos triunfos notables en Breitenfeld, y en cuestión de varios años, algunas de estas reformas comenzaron a ser copiadas por otros ejércitos.
Detalle de un cañón de cuero
Gustavo Adolfo también puso un gran énfasis en el papel de la artillería, e intentó mejorar las capacidades de este arma. En la batalla de Dirchau (8 de agosto de 1627) se utilizaron cañones de cuero ultraligeros, que disparaban balas de casi 2kg. El ánima del cañón estaba formada por un tubo reforzado por aros de hierro, afianzados con cuerdas de cuero hervido. Estas piezas, que pesaban algo más de 50kg, podían ser arrastradas por solo dos caballos, lo que significaba que podían formar parte de los regimientos de infantería.
Posteriormente se introducirían en el regimiento cinco piezas mas pesadas que tenían más alcance. Estos cañones eran menos propensos a calentarse que los cañones ordinarios y podían ser disparados más rápidamente. Se estima que, aún no teniendo la misma potencia de fuego, tenían una cadencia de fuego un 50 por ciento superior a los ordinarios.
Muerte de Gustavo Adolfo
La mayoría de las reformas introducidas por Gustavo Adolfo en sus ejércitos fueron adoptadas en último término por los ejércitos de toda Europa, aunque algunas, como las descargas de pelotón, desaparecerian antes de 60 0 70 años. Sin embargo, y pese a la muerte del monarca sueco en 1632, la maquinaria militar sueca había logrado redefinir en gran medida la manera en que las tropas luchaban en el campo de batalla. Algunos ejércitos, como el español, intentarían resistirse al cambio, continuando con la utilización de los mismos sistemas tácticos empleados antes del comienzo de la Guerra de los Treinta Años. Sin embargo, la mayoría de los líderes militares de otros ejércitos pronto comenzaron a comprender los beneficios de las lecciones facilitadas por el ejército sueco.
Viene de Las Innovaciones de Gustavo Adolfo (I) – La Infantería
Si te gustó, te puede interesar la serie GEHM Tercios de España
Aprovecho la entrada para presentaros mi nuevo libro LOS TERCIOS EN AMÉRICA – LA JORNADA DEL BRASIL. SALVADOR DE BAHÍA 1624-1625
También te puede interesar:
LOS TERCIOS EN EL MEDITERRÁNEO – LOS SITIOS DE CASTELNUOVO Y MALTA
LA GUERRA DE FRISIA: LAS CAMPAÑAS DEL CORONEL VERDUGO EN EL NORTE DE FLANDES 1579-1594
Tamibén te puede interesar: LOS TERCIOS DE FLANDES EN ALEMANIA: LA GUERRA DEL PALATINADO (1620-23).
Los suecos también usaron la táctica ya existente de apoyar a su caballería con infantería que tenía la misión de hacer la primera descarga y romper la carga enemiga para luego ser contracargada por la caballería sueca.
Respecto a los españoles en realidad no iban tan atrasados, los batallones también se hicieron más pequeños y aumentaron el número de armas de fuego (si bien muchos eran arcabuceros, aunque con los arcabuces mejorados).
Por otro lado algunos de los refinamientos de Gustavo Adolfo fueron desapareciendo al hacerse más germano su ejército.
Hola APV, la táctica de debilitar las cargas de caballería con infantería es antigua,en efecto. De hecho se utiliza con mucha profusión disponiendo grupos de mosqueteros escondidos interponiéndose en el camino de la carga. Sin embargo, el propio acompañamiento es más novedoso.
Respecto a los españoles, aunque las unidades se hicieron más pequeñas, siguieron apostando por la profunidad de filas, que es justamente lo que elimina Gustavo Adolfo por no resultar ya útiles con una artillería cada vez más potente.
saludos
Respecto a la profundidad es discutible, las formaciones españolas fueron reduciéndo su profundidad, y sino me equivoco en 1685 eran de 4 hombres en un frente de 72 (de los diversos tipos de infantes, con posiciones variables).
Lo cuál no era muy diferente de los franceses contemporáneos.
Las diferencias estaban más en el armamento (tardía adopción del mosquete ligero), entrenamiento y los problemas de la caballería española.
Bueno, a ver. Estamos hablando de las reformas de Gustavo Adolfo, que se desarrollan entre los años 1627 y 1630 en plena Guerra de los Treinta Años. Hay ejércitos que se ponen manos a la obra y empiezan a adoptarlas.
En la guerra civil de Inglaterra 20 años después se pueden apreciar en las formaciones inglesas. Sin embargo España, todavía por esos años sigue empeñada en el escuadrón en profundidad y así aparece en los esquemas de los tratados militares. Además, por supuesto, de los problemas que muy bien indicas sobre la falta de interés que pone en la caballería y en la artillería.
El año 1685 es una época ya muy tardía para los propósitos de esta entrada y el ejército español ya no era un modelo a seguir, estaba en plena transformación.
Buenos días.
En Histocast se comentaba que los reitres llevaban su armadura de color negro como protección contra la corrosión, pero a mi eso me parece poco efectivo.
No sé si dispone de algún tipo de información al respecto, pero si era un método tan efectivo sería lógico que los ejércitos de la época lo adoptaran para sus tropas acorazadas (como los los piqueros de los tercios en primeras filas). Sin embargo, solo se usó en reitres o en las armaduras de la nobleza que eran más bien decorativas.
Me parece que sería más bien un elemento decorativo, del tipo de la época, para ser reconocidos en el campo de batallas de sus homólogos a caballo.
Hola Deimos. Precisamente fui yo el que hablé en el Histocast 20 de Tercios de Flandes [http://www.histocast.com/podcasts/histocast-20-tercios-de-flandes/] sobre los reiters y su equipo.
Relativo a lo que comentas hay varias cosas. Los Reiters tienen su origen en Alemania en el siglo SVI y son partidas de caballería que visten casi como los hombres de armas pero que no son más que grupos de mercenarios que merodean por tierras y señoríos. El uso que hacen de su equipo militar es muy intenso y no son nobles que puedan pagarse con facilidad el material. Por ello tienen que cuidarlo, así que pintaban sus armaduras de negro para protegerlas contra la corrosión.
Esta caballería, por la utilización de pistolas en el campo de batalla, fue imitada (de ese concepto nacen los caballos coraza españoles o coraceros europeos) por los ejércitos europeos, perdiendo relevancia las lanzas medievales.
A principios del siglo XVII se pone de moda el negro en la armadura. Así que ya no solo los soldados pobres pintan las armaduras para preservarlas, también los nobles y los hombres importantes se hacen ricas armaduras de color negro, predominando la moda hasta mediados del siglo XVII.
Había también otros medios para preservar el equipo de la humedad. Por ejemplo era muy común cubrir piezas y armas con sebo o grasa para aislarlas del agua.
En cuanto a los piqueros o coseletes también los habría que se pintaran la armadura de negro, que duda cabe, y más a partir de que se pusiera de moda. Sin embargo, la necesidad de preservación del equipo de los piqueros era menor, puesto que solo se lo ponían para luchar. Yendo entretanto, bien guardado en al impedimenta o en los cuarteles. Los Reiters, sin embargo, al ser partidas de merodeadores, vestían sus armaduras prácticamente a diario.
Espero haber respondido a tu respuesta.
saludos
Entiendo lo que comentas pero choca la idea general que se tiene de la época.
Para proteger de la corrosión en aquella época usaban el pavonado en frío o bien pintura. Y en ambos casos no eran protección eficaz porque la capa que se quedaba era muy fina.
Por otro lado, el equipo de reiter y un coselete eran muy similar, no es forma ni tamaño pero si en cantidad. El reiter no era una armadura completa al igual que el coselete y tendrían los mismos problemas.
También estaría el hecho de que si fuera tan popular por los soldados entonces el reiter no sería reconocidos por su armaduras negras (¿Qué los diferenciaría entonces si no es el por el color negro de sus armaduras que es lo más reconocido?).
En la wikipedia en ruso de este tema (no es que sea una gran fuente pero es muy completa) http://es.wikipedia.org/wiki/Reiter (saltar a ruso y luego traducir a inglés)
En ella explican que el color negro se debe a su condición de mercenarios , de manera que no pudieran ser afiliados a ningún bando. El segundo hecho por el que podrían ser negras es por los herreros, que oscurecían la armadura para que no vieran los desperfectos y fallos de su trabajo.
Quizás es que estoy rizando el rizo demasiado.
Hola Deimos, para proteger la corrosión hacían lo que podían y no siempre con éxito, porque si un material se oxida, acaba oxidándose. El hecho de que los maestros armeros utilizaran la pintura negra para ocultar los defectos entra dentro de toda lógica. Ya comenté anteriormente que los reitres no eran personas adineradas y por tanto la calidad de su equipo era la que les permitían sus pagas y rapiñas.
Ya te comenté antes que los coseletes o piqueros solo se ponían la armadura para luchar, mientras que los reitres por sus características de moerodeadores, las vestían a menudo; esto implica un menor desgaste en el equipo del coselete, que estaría convenientemente guardado cuando no estuvieran en el campo de batalla.
La distinción de los reitres por su color negro es el origen y está en el siglo XVI, de ahí su nombre en alemán schwartz reiters. Pero a finales del siglo y durante el siglo XVII, los coraceros o caballos corazas, sus «sucesores» acabaron imponiéndose en los ejércitos, haciendo que estos mercenarios alemanes perdieran su caracter «único».
saludos
Pues creo que me ha aclarado el tema. Gracias.
Perdon, pero las fuentes donde estan? Con que fundamentos escribis esto sin citar bibliografia?
Hola, ya alguna vez hemos aclarado que las entradas diarias de este blog tienen mero caracter divulgativo de la Historia Militar. Si desea consultar estudios y ensayos de carácter académico puede pasarse por nuestra sección Biblioteca o dirigirse a una librería especializada.
Saludos.