El hecho que el Tercer Ejército italiano no se fuera a desplazar a a Alsacia no fue el fin de la cooperación italogermana. En enero de 1913 se empezó a negociar un acuerdo naval entre los miembros de la Triple Alianza. Dicho acuerdo fue complicado de obtener, pues no se llegó a un punto inicial hasta julio y se firmó en noviembre de ese año. Sus tres flotas operarían bajo un mando unificado en el Mediterráneo , en manos del oficial de la marina italiana o austrohúngaro de mayor rango a bordo, con el objetivo de impedir la llegada a Francia de refuerzos procedentes del Norte de África y planeando un desembarco naval en la Provenza. Las principales bases serían establecidas en el triangulo Messina-Augusta-Tarento, con bases avanzadas en La Mladdlena, en Cerdeña, y La Spezia.
General Alberto Pollio. El partidario de la Triple Alianza en Roma
Por entonces Italia podía contar con 15 cuerpos de ejército, formados por 25 divisiones activas y 10 de reserva, más cuatro divisiones de caballería. En caso de guerra contra Francia, según los planes del general Pollio, cuatro cuerpos de ejército atacarían en los Alpes, mientras cinco de ellos serían empleados en la operación anfibia en la Provenza. Uno de los restantes cuerpos de ejército se emplearía como reserva estratégica, con otros tres cuerpos empleados para vigilar la costa ante cualquier desembarco enemigo. Los dos restantes estaban en disposición para un hipotético despliegue en Alemania.