Rodas es la mayor de las islas del Dodecaneso, en el Mediterráneo oriental, y se encuentra a unos 15 kilómetros de Anatolia. Tras abandonar Tierra Santa, los Caballeros de San Juan (Hospitalarios) se hallaban instalados en Rodas, la última posesión cristiana del Mediterráneo oriental.
Los Caballeros de San Juan estaban en posesión de Rodas desde 1310 y a lo largo de los años fortificaron tanto su puerto como sus tierras altas. Los caballeros se valían de la isla, situada en mitad de las principales rutas marítimas otomanas, para asaltar mediante acciones corsarias los barcos musulmanes de todo el Mediterráneo oriental. Esto llevó al sultán Mehmed II (Mehmed el Conquistador) a organizar un infructuoso asedio de tres meses en 1480.