Nuestro amigo @goyix_salduero de @HistoCast ha estado recientemente en Riga y nos trae una historia de lo más curiosa.
En el año 1994 los militares rusos dejaron Letonia y también muchas sorpresas en el terreno. Los letones con su recién estrenada nueva independencia encontraron entre otras cosas una base secreta con el octavo mayor radio telescopio jamás construido.
Su misión era interceptar las comunicaciones de la OTAN, norteamericanos y sus aliados. En principio parece que estos ni se enteraron. Pero ¿como es posible que semejante monstruo no fuera detectado sobre el terreno? Hay varias razones:
- Letonia tiene una baja densidad de población.
- Letonia es muy llana, por tanto la cuenca visual es limitada.
- La zona de la base esta deprimida y rodeada de coníferas, otro limitador de la cuenca visual.
- Los soviéticos decretaron la exclusión poblacional de toda el área por ser zona fronteriza (costa).
- Los soldados soviéticos vivían en la propia base.
Visitar el lugar (
http://goo.gl/maps/bOSF ) es como adentrarse en Chernobil por las viviendas soviéticas abandonadas. En medio del bosque búnkeres. Y la instalación en el corazón del lugar, sobre una enorme base de hormigón rodeado de coníferas pantanosas y dunas. Como en una ciudad fantasma los operarios actuales son recogidos a la misma hora por un minubús para recorrer los 30 km a la ciudad más próxima, Ventpils.
Cuando los rusos abandonaron las instalaciones cortaron cables y arrojaron ácido a paneles y mecanismos pero los letones con ayuda de la UE volvió a poner en servicio del radio telescopio para fines científicos. El paso del tiempo y sobretodo los paseos turísticos sobre su campana doblaron muchas placas de aluminio del radio telescopio, algo que tiene difícil solución pues los ángulos de construcción de las placas sólo los conocen los rusos.
Así que 18 años después con todos los medios tecnológicos disponible el error mínimo obtenido es de 6 milímetros cuando la tecnología soviética mantenía sólo 2 milímetros. La solución es fácil, preguntar por los planos a la ex-KGB.
Seguro que estarán encantados de facilitarles los datos…
Ciertamente, en todo caso es una noticia de lo más curiosa, y casi esperanzadora. Tal vez los satélites no puedan verlo todo desde el cielo.
Saludos.
A mi me sigue fascinando el secretismo soviético, que tenía a una comunidad completa viviendo en un paraje en el más absoluto de los secretos. Puro materialismo histórico.
saludos
Una cosa es que nadie supiera que el chisme estaba allí y otra es que a alguien no le interesaba revelar que sabía que estaba.
Me explico: si tú dices que sabes que «eso» está allí, estás revelando implícitamente que tienes la capacidad de verlo/detectarlo… ¿Con satélites espia? En tal caso,¿qué resolucion visual deberían tener para poder ver algo así? ¿O quizá llevan otros elementos instalados? Y así sigue el razonamiento… así que seguramente sea mejor no decir que lo sabes (o que lo sabías) 😉
Muy probable Hawat. Sin embargo, tantos años después y con la tecnología en otro nivel de la estratosera, siempre podría decirse.
Y en cuanto a los propios letones. Supongo que si uno de ellos se enteraba de que eso estaba allí, se convertía inmediatamente en el primer interesado en no revelarlo.
🙂
Saludos.